El vino en el mundo de hoy.
Prof. Dr. Carlos Eduardo Daly
Gimón
Uno
de los concursos mundiales más renombrados en materia de Vino, el Medallero
Bacchus, organizado por la Unión Española de Catadores, arroja como resultados
para el Grand Bacchus de Oro 2019 al “Aurora Reserva Chardonnay” (Brasil) en
primer lugar, seguido por el “Pierre Legras Coste Beert”, (Champagne, Francia),
en tercer lugar al “Delavenne Grand Cru Brut Reserve” (Champagne, Francia), en
cuarto lugar el “Casa Santar Reserva Blanco 2017” (Portugal), en el quinto
lugar al “Aurelius Cibebovy Vyber 2017” (Eslovaquia), y, además, de los 18
caldos restantes incluidos en esa renombrada clasificación, 15 son españoles [1].
Al
lado de los Premios Bacchus, los Master of Wine reúnen una serie de concursos
entre los cabe destacar el Decanter Worl Wine Awards (DWWA), el International
Wine Challenge (IWC), el International Wine and Spirit Competition (IWSC), el
Concours Mondial de Bruxelles Wine Competition (CMBWC) y el Challenge International
du Vin (CHIV).
En
estas y otras instituciones se clasifican los mejores vinos del mundo.
No
obstante, los factores que aclaran el desenvolvimiento del vino va más allá de
su ubicación en un índice determinado, o de su premiación circunstancial.
Es
como decir, salvo excepciones, que los que más beben no son los que más vino
producen, ni siquiera los que más gozan de posiciones de liderazgo en los
principales mercados.
Para
verificar los contrastes entre los grandes agentes y tendencias del vino, y su
comportamiento personal, sólo vale detenerse en el hecho de que los países de
más consumo per cápita a nivel mundial son: Ciudad del Vaticano (54 litros),
Andorra (46 litros), Croacia (44 litros), Eslovenia (44 litros), Francia (42,5
litros), Portugal (41,7 litros), Suiza (40,5 litros),Macedonia (40,4 litros),
Moldavia (34,2 litros) e Italia ( 33,3 litros).
Pero
vayamos por partes.
El
consumo de vino en el plano internacional viene registrando una clara estabilidad,
de acuerdo a los datos más recientes de la Organisation Internationale de la
Vigne et du Vin (OIV)[2].
Prácticamente
desde 2014 la adquisición de caldos por parte de los principales mercados se ha
situado alrededor de los 248 millones de hectolitros[3], aunque el consumo de 2018
evidenció una ligera disminución con respecto a 2017, situándose alrededor de
los 246 millones de hectolitros.
Más
allá de los defectos metodológicos que pudieran presentarse en la elaboración
de esas cifras, Estados Unidos es desde 2011 el primer consumidor mundial de
vinos con una marcada tendencia hacia un crecimiento de la demanda interna: en
2018 alcanzó los 33 millones de hectolitros.
En
Europa, la estabilidad en materia de consumo es la pauta que predomina en los distintos países con Francia
a la cabeza con más de 26.8 millones de hl; le siguen Italia con 22.4 millones
de hl, Alemania con 20 millones de hl, Inglaterra con 12.4 millones de hl,
España con 10.7 millones de hl de consumo y finalmente Portugal con 5.5
millones de hl.
La
otra nación, en orden de importancia en el ranking de los principales
consumidores, es China con 18.0 millones de hl, aunque bien vale la pena
resaltar que el gigante asiático experimentó un fuerte descenso en sus niveles
de consumo entre 2017 y 2018, cuando esa disminución representó más de un 6.6%.
Después
se ubican, Rusia, América del Sur y Africa.
La
producción de vino por su parte ha mostrado una clara tendencia al alza desde
2017, con una cifra de 292,3 millones de hectolitros en 2018; siendo la más
elevada desde 2005 hasta la actualidad.
Si
revisamos esos datos por región, el viejo continente muestra a Italia como el país más destacado en cuanto a cosechas se refiere
con más de 54 millones de hl, en segundo lugar Francia, y España en tercer
lugar. El aumento en las capacidades productivas en los viñedos también se ha
dejado sentir en Alemania, Rumanía, Hungría y Austria y Suiza, particularmente
para el año pasado y el 2019.
Frente
a las alzas referidas, se identifican otras naciones europeas tradicionalmente
influyentes en la producción vinícola pero que han sido impactadas por las
variaciones del clima y han registrado bajas significativas en sus resultados.
En este último grupo destacan, de acuerdo a la OIV, Portugal, Rusia, Grecia, y
Bulgaria, quienes han experimentado una disminución de -18,2%, -28,4%, -21,2% y
-17,1% respectivamente.
Con
relación al continente asiático, la merma en la producción ha sido menor que en
los escenarios europeos, un -2,3 con relación a 2017.
En
los Estados Unidos ha habido un crecimiento en la producción vinícola de más de
0,5% con respecto al año anterior, y si se examina esa tendencia en términos
quinquenales el aumento es superior al 2,7%[4]. Argentina y Chile han
alcanzado igualmente resultados positivos en términos productivos, aunque ha
sido este último quién ha mostrado rendimientos superiores a todos los otros
productores latinoamericanos, llegando incluso a superar sus propios
rendimientos de 2012, 2013 y 2015. Brasil se ha quedado rezagado en la tercera
posición.
Para
2018, Suráfrica exhibe una reducción cercana al 1,4% y Oceanía en su conjunto
muestra un estancamiento evidente de sus principales productores
como es el caso de Australia y Nueva Zelandia.
Queda
por examinar cual ha sido la pauta en el intercambio internacional del vino[5].
Vale
la pena separar las exportaciones según su valor, y las exportaciones de
acuerdo al volumen exportado.
En
cuanto al volumen de vinos exportados, España es el país más importante con
20,9 millones de hl, un 19,4% del mercado mundial.
Los
volúmenes exportados exhiben resultados diferentes por países pues Australia,
Estados Unidos y Argentina aumentan su participación mientras que España,
Francia, Chile y Suráfrica bajan su presencia en los mercados con respecto a
2017.
Medido
en valor, Francia encabeza este ranking con más de 9,3 mil millones de euros, a
lo cual tenemos que resaltar que los países que experimentan una tendencia al
alza en este renglón son la misma Francia, y enseguida vienen Italia, España,
Alemania y Portugal. Muy por el contrario, las naciones con marcada tendencia a
la baja de las exportaciones en términos de valor son: Estados Unidos, Argentina,
Chile y Nueva Zelandia.
En
fin de cuentas, los países que dominan por volumen los intercambios
internacionales de vino son España, Italia y Francia con más del 50% del
mercado mundial en 2018, es decir, 54,8 millones de hl.
Francia
e Italia son los líderes si se mide en términos de valor, con 19,6 % y 9,3%
respectivamente.
Por
su parte, los grandes importadores de vino son Alemania, Inglaterra, Estados
Unidos, Francia y China, quienes representan más del 50% del total.
En
2018, Alemania importó vino por la cantidad de 2.619 millones de euros,
Inglaterra 3.510 millones de euros, Estados Unidos 5.245 millones de euros,
China por un monto de 2.415 millones de euros y Francia por 861 millones de
euros.
Finalmente,
la superficie cultivada, más allá del destino de las uvas, experimentó un alza
muy relativa hasta alcanzar las 7,4 millones de hectáreas. Corresponde a España
la posición de vanguardia en cuanto a espacios cultivados con una cantidad de
970.000 hectáreas, superando a China que cultivó más de 875.000 hectáreas y
Francia con cerca de 793.000 hectáreas.
Los
registros estadísticos del año 2019 todavía están incompletos, y falta por ver
el impacto que el cambio climático, la inestabilidad de los mercados provocada
por el Brexit y la guerra comercial que sacude la economía mundial tendrán
sobre un sector de tanta relevancia en el ámbito de los negocios y de hábitos
de consumo; pero sólo para tener una referencia monetaria, es un sector que representa
alrededor de 31.300 millones de euros en la coyuntura global de estos días.
[2] www.oiv.int.
[3]
Wikipedia define a un
hectolitro como: “una unidad de volumen equivalente a cien litros, representado
por el símbolo hl o hL. Es el segundo múltiplo del litro y también equivale
a 100 decímetros cúbicos. Se le suele utilizar generalmente como medición de la
producción industrial de bebidas alcohólicas, especialmente vino y cerveza”.
Veáse https://es.wikipedia.org
[4]
Veáse “Note de Conjoncture
Mondiale. Situation du secteur en 2018. Avril de 2019”. Tomado de www.oiv.int.
Consultado el 10/10/2019.
[5]
Si el lector quisiera profundizar sobre este aspecto, recomendamos consultar
Rodriguez García, Juan. “Comercio Internacional del vino, globalización y
denominaciones de origen”. Tesis Doctoral. Facultad de Ciencias Económicas y
Empresariales. Dpto. de Economía Aplicada III. Universidad de Sevilla. 2015.
Disponible en https://idus.us.es › xmlui › bitstream › handle
Comentarios