Saudi Aramco y los gigantes petroleros de la actualidad.

    

        Prof. Dr. Carlos Eduardo Daly Gimón

La Arabian American Oil Company (Aramco) que acaba de revelar ganancias superiores a los 48.000 millones de $ en el segundo trimestre de 2022, es probablemente la empresa petrolera más importante del mundo en la actualidad y una de las más rentables a escala internacional.

Le siguen en orden de importancia, la rusa Pao Gazprom, la National Iranian Oil Co (NIOC), Exxon Mobil, Rosnef, y Petrochina (CNPC), para sólo citar las más importantes. 

Obviamente, para elaborar cualquiera de las clasificaciones a las que se hace referencia hay que fijar cuál es el o los parámetros que se determinan para jerarquizar a los consorcios energéticos. Si se trata de las ventas realizadas, la China National Petroleum (CNPC) lleva un amplia ventaja pues sus ingresos superan los US$300.000 millones, según la revista Fortune.

Aramco Saudí es una Empresa Transnacional que tuvo su origen histórico en Arabia Saudita, país líder en materia de producción/exportación petrolera, lo que le da importantes ventajas en cuanto a capacidad de producción de petróleo se refiere.

La NIOC, Empresa Pública dependiente del Ministerio de Petróleo de Irán, alcanzó una producción de 2.574 millones de b/d en junio de 2022, y aún cuando Irán ha sido sometido a sanciones económicas y financieras por parte de los Estados Unidos y la Unión Europea, ha venido incrementando sus niveles de producción y aumentando su participación en el mercado petrolero internacional.

Pao Gazprom es también una corporación energética de gran importancia en la producción gasífera y petrolera, pero  sobre todo orientada a atender la demanda de gas de países europeos y otras regiones del mundo. Exxon por su parte es la empresa estadounidense más influyente en materia petrolífera con una producción que se ubica alrededor de 3.9 millones de b/d y unos resultados operativos por el orden de los 4.490 millones de $, por lo que sus ganancias de este 2022 se ubican en montos cercanos a los 3.300 millones de dólares.

Rosnef es una empresa del estado ruso de importante presencia en los escenario energéticos internacionales, con un significativa participación en la actividad de transporte marítimo, la comercialización de crudo, la actividad de refinación y sus derivados.

La Corporación Petrolera China, también conocida como CNPC, es un conglomerado que abarca un conjunto de actividades en la producción de gas y petróleo, servicios para los campos petroleros, refinación, comercialización, petroquímica y hasta servicios financieros y energías renovables. Su producción de petróleo rondará los 3.87 millones de b/d, y en materia de gas será de 214 mil millones de metros cúbicos, aproximadamente.

De un total de 15 de los principales gigantes petroleros registrados en todo el planeta, hemos resaltado cuatro (4) porque los consideramos como los más relevantes, y son, a su vez, la expresión del control que sobre el sector de la energía mantienen estos conglomerados.

En un artículo reciente de BBC (15/08/2022), se pone de manifiesto un hecho de suma relevancia como es la valoración que puede efectuarse de las ganancias de Saudí Aramco si se les compara con el PIB de la lista elaborada por el Banco Mundial.

Según ese parámetro, las ganancias de Saudí Aramco del segundo trimestre de 2022 le colocan en el puesto N° 88 de esa lista, lo cual significa que Saudí Aramco obtuvo ganancias por encima de más de 119 países que conforman la lista ya aludida y que recoge un total de 207 países.

Ello implica no solamente un aumento de más del 90% si se le compara con el año anterior, que supera su propio record, y que, además, es el nivel de ganancias más elevado del consorcio petrolero saudi desde que cotiza en bolsa.

Este hecho ocurre en un momento en que la economía mundial aspira a superar la contracción económica que ocasionó la pandemia 2020-2021, y en medio de una agresión bélica de gran envergadura de Rusia contra Ukrania, todo lo cual ha provocado un incremento sostenido de los precios del petróleo y del gas en los mercados internacionales, e igualmente el alza descontrolada de los precios de los bienes y servicios en el mundo entero.

El aumento de las ganancias de Saudí Aramco es también válido para los 15 consorcios petroleros que controlan, mayoritariamente, el negocio petrolero global, y es el reflejo de la realidad energética que prevalece en el siglo XXI, en la cual son cada vez más urgentes los ajustes necesarios para combatir el cambio climático, pero que sin embargo, la realidad cotidiana del poder influyente de los conglomerados energéticos es cada vez mayor, y la sustitución de las energías fósiles por energías limpias y renovables sigue siendo un desideratum de la ciudadanía que observa la lentitud de los cambios necesarios para avanzar hacia una estrategia energética sostenible.

Al igual que los gigantes de la tecnología que tanto impactan los modelos de consumo y de conducta de los individuos, los titanes energéticos conservan posiciones y aumentan ganancias en un mundo inquieto por lo que observa, pero con medios muy limitados para definir una estructura económica en la que prevalezca el equilibrio y el interés colectivo.